Los animales han formado parte de un programa de crecimiento y desarrollo para asegurar su supervivencia en el mar

Sueltan al mar las cuatro tortugas que se criaron en el Acuario de Sevilla

La Fundación Oceanogràfic soltó ayer por la tarde en la playa El Serradal de Castellón 20 tortugas bobas (Caretta caretta), que, procedentes del nido descubierto en la zona en julio de 2019, en gran parte han seguido el programa de crecimiento y desarrollo, “head starting”, en las instalaciones del Oceanogràfic y cuatro en el Acuario de Sevilla.

Cuatro de las tortugas, que recibieron por nombre Castelló, Miguel, Navel, Posidonia, llevaban instalado un emisor satelital, gracias a la aportación de la Fundación Azul Marino, lo cual permitirá un seguimiento monitorizado de la trayectoria de estos animales y un mayor conocimiento para la ciencia sobre su comportamiento en alta mar.

Cedidos por la Conselleria de Agricultura y Transición Ecológica, durante estos últimos siete meses el equipo técnico del acuario hispalense ha cuidado de los animales y ha podido estudiar el desarrollo, comportamiento, habilidades y condiciones fisiológicas para aportar más conocimiento sobre esta especie, que se encuentra, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN, por sus siglas en inglés), amenazada, ahora, también, por la basura marina.

El Acuario de Sevilla forma parte del grupo de centros españoles que se ocupa de la conservación de tortugas marinas, que aparecen varadas, dañadas en el litoral o, como en este caso, asegurando la supervivencia de las crías procedentes de diferentes nidos que se ven amenazados por diversas actividades humanas.

Los encargados de dejar en la arena estos jóvenes quelonios fueron la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, la consellera de Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, la presidenta de la Fundación Oceanogràfic, Celia Calabuig, y un representante de la Policía Local que intervino en el descubrimiento del nido.

Igualmente participaron miembros y voluntarios del Acuario de Sevilla, Fundación Oceanogràfic y Fundación Azul Marino.